Mientras en México una enfermera gana entre 8 mil y 18 mil pesos al mes, en Estados Unidos su salario puede superar los 100 mil pesos mensuales, además de contar con seguros, bonos y estabilidad laboral.
El contraste es brutal: en México, muchas deben hacer dobles turnos y comprar su propio material; en EE. UU., son valoradas y mejor pagadas.
La falta de incentivos, el agotamiento y los bajos sueldos están provocando una fuga masiva de talento médico mexicano.








